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CON MOTIVO DE LA MUESTRA DE VÁZQUEZ DENTRO DEL SALÓN DE GRANADA EL PERIÓDICO GRANADA HOY PUBLICO ESTE TEXTO

Decía Rodin que para crear primero debía vivir. No sé que pensaría Vázquez sobre la frase pero lo seguro es que para él fue una especie de mandamiento vital y artístico. Vázquez contaba lo que vivía, primero como sus compañeros de profesión en Bruguera, las miserias de una España de hambre y dictadura, de pobreza y de perdedores. Luego ya empezó a contarse a si mismo, consciente de lo que su vida era. Y no pienso intentar definir aquí su vida, sería redundar en lo dibujado por el propio Vázquez y que se puede ver a las claras en la exposición que le dedica el XI Salón Internacional del Cómic de Granada.

Y es que dedicar una exposición al Vázquez es un acto de justicia, poética si se quiere, pero justicia. Justicia con la cultura popular de este país, con los que rieron y hasta pensaron con las Hermanas Gilda, Anacleto o el propio Tío Vázquez, con los que se dejaban la piel haciendo tebeos sin reconocimiento alguno, con los que defienden que lo que pasa dentro de las viñetas es arte, Cultura con mayúsculas (porque Vázquez lo demuestra con creces y descreimiento), con los que van diciendo por ahí que Vázquez fue un genio (y que saben muy bien lo que dicen), con los que se enfrentaron a la hercúlea tarea de editar a Vázquez, con los se quedaron sin cobrar lo que Vázquez les debía (que le vamos a hacer, el hombre era así), con los que convencieron al Ayuntamiento de Granada para que le pusieran “Tío Vázquez” a una calle y que llevan más de once años demostrando que el tebeo cabe en Granada y en Andalucía.

La exposición By Vázquez es fruto de la ya larga colaboración entre la Obra Social de la Caja San Fernando y Veleta, organizadores del Salón Granadino y del Encuentro del Cómic y la Ilustración de Sevilla. Gracias a esta colaboración la obra de Vázquez vuelve, justo diez años después de su fallecimiento, a la ciudad que lo enamoró en sus últimos años de vida. En la muestra se puede dar un vistazo a casi todas las etapas de la carrera artística de este genio, desde sus primeras páginas de la Familia Cebolleta hasta la primera página de la última historieta que dibujó, en Granada, precisamente (y con tintas del que ahora es director del Salón, Alejandro V. Casasola), pasando por Anacleto (incluyendo dos falsos originales, falsificación del propio Vázquez), la Familia Churumbel, Gu-Gu, las Hermanas Gilda, historietas firmadas con el pseudónimo de Sapo, y varias páginas con el propio Vázquez de protagonista. Mención especial requiere el original del cartel de las Primeras Jornadas del Cómic de Granada, germen del actual Salón.

En definitiva esta exposición es una ocasión magnífica para volver a descubrir la obra de este genio del humor gráfico, posiblemente del mayor genio de la historieta que ha dado este país. Por cierto, que si Vázquez hubiera nacido en Francia o Italia o Bélgica o Japón no tendría una calle, tendría plazas, esculturas y museos, pero aquí…

Paco Cerrejón